martes, 31 de mayo de 2016

SIN DRAMAS...



Ya no lloraré más a solas en mi habitación, invadida por la tristeza y la desolación. No. 
Se acabó disimular y callar como si todo fuese perfecto, como si la felicidad fuera el ingrediente principal de esta vida, mi vida. 
A nadie le importa cuál sea la realidad, solo a ti y a mí, a nadie más le afecta. Sigue tu camino y olvídame, solo eso te pido. 
Lo que tú y yo vivimos, lo que hablamos en privado, lo que ocurrió entre cuatro paredes... las nuestras, las de tu casa y mi casa, eso quedó allí. 
No hagamos daño con versiones encontradas a la gente que nos ama. No propaguemos un reguero de odio y rencores. Recuerda que un día, al comienzo, dijimos que el respeto sería la base de esta relación cuando faltase el amor. 
Piensa que todo lo que un día empieza, de la misma manera puede acabar, eso no está en tu mano ni en la mía evitarlo. Las personas cambiamos, o nos cambia la vida, las circunstancias, la experiencia de los años nos hace aprender. Abrimos los ojos y descubrimos que donde antes había amor solo queda "un poco de cariño", en el mejor de los casos. Que ya hay poco en común y lo que compartimos es por la inercia de la costumbre, casi siempre a la fuerza y una se acostumbra a ceder más de la cuenta, hasta que "tanto va el cántaro a la fuente... que al final se rompe". 
No hagamos de esta ruptura un mundo, creemos un mundo nuevo a partir de ella. Un mundo mejorado, un reto increíble, con el miedo a lo desconocido, sí, pero también con la ilusión de sorprendernos de que todo sea para mejor. Mejor para ti... mejor para mí. Mejor para todos
.

Airam E. M.

(Aportación al reto de Relatos Compulsivos. Imagen tomada de la red.)

7 comentarios:

  1. Sí, conozco ese poema, aunque no sabía quien era su autor, gracias. Lástima que no haya una máquina que mida o pese el amor, sería interesante saber... jeje

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  2. Gran declaración de intenciones. Lo ideal sería que, antes de llegar a ese punto, la pareja pusiera de su parte para volver a sorprenderse mutuamente, para no dejar de enamorarse día tras día. Pero si ya ni eso es posible, entonces, como muy bien dices, lo mejor es seguir cada uno por su camino tan amigos, con el tiempo prudencial de duelo, por supuesto, pero sin rencores.

    Saludos.

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    1. Así debería ser siempre, por lo bueno que hubo y para que no se quiebre nunca ese buen recuerdo. Lástima que pasemos con tanta facilidad del blanco al negro en sentimientos y que haya tan corta distancia entre el amor y el odio.

      Gracias por tu visita.
      Saludos.

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  3. Marijose pasa por mi blog tengo un regalito para ti . Un abrazo

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  4. Suena como una triste despedida y eso entristece. Aunque solo sea un poema.

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    1. No debería entristecer, sino crear conciencia de que el que algo termine, no significa que sea el fin de todo, puede ser el principio de algo, quizá mejor... ¡quién sabe!

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